Una vez escribimos en este blog, la opinión de uno de nuestros colaboradores, quienes nos cuentan su experiencia y vivencias enseñando ingles.
Mi nombre es Mayra y para quienes aún no me conocen, soy profesora de inglés en One Language, Puerto Montt.
Hoy vengo a contarles sobre mi experiencia con este idioma y como ha influido en mi vida.
Cuando era pequeña comencé a tener ingles en 4° básico y quedé enamorada enseguida. Siempre me fue super bien y no sé por qué. Quizás, debe ser porque siempre escuchamos música y veíamos películas en inglés en mi casa, pero nada más que eso, mis padres no hablan ni una palabra en inglés.
Cuando estaba en el colegio lo daba todo y más en Ingles, siempre obtuve las mejores notas en este ramo, Incluso disfrutaba ayudar a la profesora a revisar las pruebas de los alumnos mayores.
Luego cuando salí del liceo tenía que ver que iba a hacer con mi vida y me di cuenta que lo que más disfrutaba en el colegio era, adivinen, el inglés, así que decidí estudiar pedagogía. Sin embargo, esto solo lo hice porque quería hablar inglés y viajar por el mundo en cruceros, no porque quería enseñar, menos trabajar con niños o adolescentes.
Luego de los primeros años en la universidad y algunas prácticas profesionales me di cuenta que enseñar es lo mejor que pude haber elegido. Tener la capacidad y herramientas de enseñar a otro no tiene comparación. El hecho de ver como una persona evoluciona gracias a lo que le enseñas, ver esas caras sonrientes luego de ver que se sacaron una buena nota, ver que cada vez son más las personas que levantan la mano para participar y atreverse a usar el idioma es impagable. Por evolución no me refiero a que un alumno llegue a un nivel avanzado de un día para otro, me refiero a la satisfacción de lograr pequeñas metas, como, por ejemplo, aprender una palabra y ser capaz de usarla, comprender la letra de una canción o leer un texto en inglés.
Como anécdota les cuento, que alguna vez tuve la oportunidad de entrevistar pasajeros de un Crucero, donde tuve la oportunidad de conocer personas de distintos países, lo cual me permitió darme cuenta que el acento no es impedimento para comunicarse.
Uno puede tener muchos sueños, pero cuando ves que ayudas a otros a lograr los suyos sientes una satisfacción que nunca pensé que sentiría. Enseñar inglés no es solo enseñar un idioma, es conocer gente, conocer sus historias de vida, sus metas, sueños, etc.
Siempre se dice que el inglés abre puertas, pero no es solo en lo laboral, gracias al inglés he logrado mejorar en uno de mis tantos hobbies. A mí me encanta tejer a crochet pero me di cuenta que los patrones más hermosos están en inglés. Qué bueno que los puedo leer porque se inglés.
¿Lo ves? El inglés te puede ayudar a desarrollarte laboralmente pero también te puede ayudar a aprender otras habilidades, recordemos que es uno de los idiomas más hablados en el mundo, por lo tanto, siempre podremos encontrar más información de lo que queremos en este idioma.
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